Tuesday, May 22, 2007

¿Cuàl es tu intención?

Varias ideas sobre qué escribir aquí han pasado por mi mente a lo largo de esta semana, pero hay dos que no he podido alejar por completo y que no he podido decidir cuál de las dos escribir. Por ello pretendo comenzar a escribir y lo que quede aquí registrado será el post que se publicará sin importar cuál de los dos sea (si fuera alguien genial me acusaría de utilizar el método paranóico-crítico).

¿Cuántas veces han invitado a alguien a tomar un café o una cerveza? Puedo asegurar que varias, tal vez no muchas, pero sí debe haber sucedido alguna vez. Muchas veces en el momento en que se le llama a alguien por teléfono para invitar a esta persona la primera idea que le viene a la mente es que uno tiene intensiones "más allá", pero no tiene por qué ser así. Posiblemente el interés de hacer la invitación nazca principalmente de la atracción física, del gusto por mirar a la persona en cuestión, de hecho en muchos casos es así, pero finalmente la salida no tiene por qué ser estrictamente con la intención de "ligar".
El famoso "ligue", momento en que la gente saca lo mejor de sí a relucir tratando de impresionar a la otra persona. Es un comportamiento típico, invitar a alguien a cenar a un lugar más o menos romántico o un poco lujoso, hablar de temas en los que uno jamás pensaría en otra circunstancia, vestirse de manera distinta a la vestimenta del día a día. Está bien esforzarce porque la otra persona se sienta un tanto especial, pero si uno no es así todos los días y en todas las situaciones, ¿para qué forzar una apariencia por demás falsa?

Más allá de esto me pregunto cuál es la finalidad de invitar a una chica a salir y si realmente siempre es con la intención de llevar las cosas más allá. Tal vez esto sea así en muchos casos, pero no tiene por qué serlo. Tal vez esto sea algo muy idealista, pero para que una relación funcione debe haber por lo menos dos tipos de atracción, física y mental (dejando al lado la siempre difícil de comprender atracción sentimental), siendo la física "fácil" de encontrar, pero para encontrar una atracción o incluso una compatibilidad mental hay que trabajar en conocer bien a la otra persona. Es esta la razón por la que yo invitaría a alguien a salir, para poder conocer su forma de ser y que poco a poco si existe esta compatibilidad pase "algo más". Esta es tal vez mi idea, pero como ya comenté no es la generalidad, es por eso que muchas veces no es fácil invitar a alguien que nos parece interesante, para evitar una conotación que no existe en realidad.

Me gustaría que esto no tuviera que ser de esta forma, que simplemente se pudiera invitar a alguien con el afán de conocerla y nada más, sin que parezca que en una primera invitación hay una intención más allá. Tal vez nunca pase, tal vez sea poca la gente que piense como yo, pero es una propuesta que lanzo por este medio y espero les llegue aunque sea a los 5 o 6 lectores que tengo y que se esfuercen, si están de acuerdo, por promoverla.

7 comments:

Luis said...

Uy mano, ahora si me dejaste boquiabierto, jajaja. Estoy de acuerdo que muchas veces se malinterpretan las invitaciones, pero también debemos tomar en cuenta que no es de lo más común toparse con un hombre que se interese en mucho más que el físico y de ahí la cierta "paranoia" y el rechazo cuasiautomático a cualquier intento de acercamiento.
Tengo mucha flojera en este momento, pero al menos ya opiné :P
ciao.

Janis said...

La mayoria de las invitaciones, principalmente cuando conoces recientemente a la persona es por interes fisico y para conocer a la persona y encontrar la compatibilidad mental pues si es una buena inversion de tiempo pero puede que termines andando con esa persona o puede que de plano esa inversion de tiempo fue solo "una experiencia mas", creo que la situacion se vuelve complicada cuando no sabes si invitar o no a la persona o que decir cuando estes con ella, lo dificil al menos para mi es el principio de las salidas y mas cuando me agrada la persona como para "algo mas".

Diego said...

Pues si cuesta trabajao te das cuenta que no vale la pena, ¿no crees?

Angel said...

mm... la verdad no he tenido ese problema, suelo ser demasiado específico cuando de algo más se trata -como un perro cuando marca su territorio- jeje... así saben si la primera invitación es para algo más :P soy el tercer lector

sigs said...

Últimamente me he encontrado con la estúpida idea de que un hombre y una mujer no pueden ser amigos. Y debo admitir que ODIO esa premisa. Existen tantas personas con las que me gustaría salir a tomar un café sólo por que sí y no se puede por que o su vieja cree que me lo voy a agarrar o por que seguro piensa que quiero con esa persona. Creo que si existe cabida para los cafés sin intención y deberían de propagarse más. Creo que fuera de todo, al que más extraño para platicar y debido a que la atracción se cruzó ya no se puede; es al monohuevo..
Mi estimado Luis, ¿como que flojera? ¿como debatir con la certeza de que en efecto son pocos los hombres que se interesan poco en sólo conocer a la chava por que sí?....

Unknown said...

Bueno, yo vivo en kartoffellandia e invito muy seguido a mi vecina a tomar un café. Nos la pasamos muy bien pero no pasa nada. Ella tiene un wey...pero eso no impide que salgamos a tomar un coffee. Como se puede ver, las malinterpretaciones son una cuestión cultural, so, take it easy.
Creo que dije mucho y nada a la vez...

Unknown said...

aunque la verdad es que yo comencé a invitarla porque sí tenía intenciones, pero ya conocí a otra chava y de todos modos ...x....salimos a tomar un café, sin buscar algo más :P